Después de este tiempo, me pongo en contacto con vosotros para comentaros algunas decisiones que he venido pensando y en las que necesariamente vuestra comprensión espero que sea extensible a la Hermandad.
Los que me conocéis, sabéis cual es mi dedicación con cualquier proyecto al que me hago frente, ya que si no se le dedica el tiempo necesario, no se llega a ningún puerto.
De ahí, que al proponerme la Cofradía hacerme cargo de nuestro titular, el honor y la responsabilidad me hizo pensar en todo lo que podría aportar y como siempre en mis pensamientos, los pros y los contras.
Como todos sabréis, ha sido un trabajo duro y difícil, en el que la constancia y el tesón nos han hecho evolucionar, hasta llegar a el nivel alcanzado, que siendo muy humildes como nos caracteriza, creo que ha sido muy grande el avance.
Igualmente mi implicación en la Hdad. ha sido plena desde el primer momento, llegando a participar en numerosos proyectos, que creo que han sido lo suficientemente fuertes como para que la Cofradía siga con el impulso que le hacia falta.
Por eso, después de unos años difíciles, en los que muchos cambios nos hacían tambalearnos, pero con la unión y el esfuerzo de todos, salíamos de nuevo a flote, y ahora me veo en una situación muy difícil, y en la que pocas soluciones he podido encontrar.
El año pasado, con el cambio, que vosotros consecuentemente eligisteis, y en el que todos nos adaptamos, de nuevo, con la ilusión y la humildad por bandera, conseguimos llegar a buen puerto, pero fue mas duro de lo normal, y quizás por decisiones, malentendidos, organización errónea e incluso comentarios desafortunados que nos hicieron mella en este camino, el año cofrade, nos dejaba con un sabor agridulce.
Después de un cabildo de elecciones con sus luces y sombras, todo empezaba de nuevo, con la inquietud de una nueva Junta de Gobierno, en la que todos pensábamos en como sería y en que nuevo camino escogería nuestra Hermandad.
Un curso cofrade en donde las criticas, siempre bien recibidas cuando son constructivas, nos han ido haciendo mejorar cada año, pero quizás otras, nos han herido, por no esperarlas o venir de demasiado cerca.
Desde mi corta edad, y pienso, que en mi dilatada experiencia como cofrade, los años me hacen ver, que a veces un paso al lado, es una victoria. Por que soy una persona que lo da todo y se implica incluso mas que muchos de los que llevan muchos años en la Hermandad, y no pido nada a cambio de todo, pero quizás, esa involucración ya va a menos, y cuando eso pasa es que algo falla.
Han sido duras mis reflexiones, mis pensamientos, el intentar buscar soluciones, pero os juro que no he llegado a ninguna, y me duele el tomar esta decisión, pero de nuevo creo que es en beneficio de mi cofradía.
Por eso, llegado este caso, y ya aceptada de forma oficial por nuestra Junta de Gobierno, solo me queda el informaros de mi Dimisión del Cargo de Capataz del Misterio del Santísimo Cristo Resucitado y Ntra. Sra. de la Alegría, de la cual me siento mas hermano que nunca, y en la que espero que ellos, y solo ellos, me sepan colocar en un nuevo puesto para seguir colaborando y empujando hacia delante con nuestra función de propagar la Resurrección de Cristo por las calles.
Mis motivos son muchos y pocos, resumidamente no me veo con las fuerzas y la ilusión de seguir con un proyecto y una cuadrilla que es la de la Humildad e Ilusión, y en la cual mi poco tiempo disponible no me hace ser la misma persona involucrada que todos estos años, y por lo cual creo que engaño a la Hdad y a mi mismo.
Igualmente, todos pensareis que mi comunicación es muy tardía y demás criticas que recibiré, las acepto, y no comparto pero creo que mis razones me avalan, y que todavía queda tiempo para todo. De ahí que mi decisión es consensuada con una de las personas de mi equipo de capataces, y por lo que desde aquí apoyo porque el misterio siga comandado por el, para que el proyecto siga adelante y la forma de trabajar sea la misma, para que tanto la Hdad. como los costaleros sufran el cambio lo menos posible.
La persona indicada es Juan Francisco Sánchez Zambruno, “Juanfran”, amigo y persona mas que suficiente y capacitada en estos medios, con dilatada experiencia y con las suficientes fuerzas y ganas para seguir adelante con este proyecto de Humildad e Ilusión. Igualmente, estaré a su lado en todo lo que me pida, tendrá mi ayuda, mis pocos consejos y todo mi animo y apoyo. Por eso espero que lo entendáis y os pongáis a sus ordenes, para que todo siga el curso debido, y se empiece lo antes posible.
A su lado seguirá Alberto, y se suman a su proyecto Rafa Ortiz, costalero conocido por todos, y Paco Buendía.
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