
Añorando mi Realejo …
Pues si, muchas veces hemos comentado entre amigos – de esos que nos declaramos “apretaos” de nuestro Barrio – que no podríamos estar lejos de este pedazo de cielo, pero sin darte cuenta, la vida a veces te lleva a “cambiar de aires” incluso sin haber buscado ese cambio intencionalmente, pero dicen, que donde está el trabajo está la vida … y esa ha sido la razón que me ha traído a San Roque, en la Provincia de Cádiz …
En cuanto supe que tenía que incorporarme en el Colegio de “Santa María la Coronada” de San Roque, iban viniendo a mi memoria flases de todo aquello que me dejaba en mi tierra – aunque fuese de manera temporal – y desde ese mismo instante comencé a echar de menos mi Barrio y todo lo que en él tengo, que es gran parte de mi vida …
“A poco que te pongas, los viernes estás aquí y la semana se pasa rápido” … me han dicho con mucho cariño mis amigos … Sí, se pasa, o mejor dicho, la paso … mirando a mi Realejo. Y es que, este Barrio puede parecer un Barrio más, sin nada en particular y todo en especial … pero el Realejo es más que un Barrio, es un punto de encuentro de gentes castizas, que conserva la esencia del arte, y que acoge con cariño a las personas como yo que no nacimos en él. Aún así, me invitó ya desde pequeña a disfrutar del arte cofrade de mano de mi tío, me embrujó hasta tal punto de no poder estar un día sin pisar sus calles, y con el tiempo me acercó a vivir mi Hermandad desde dentro. El Realejo y sus cosas son así, y así este Bendito Barrio cambió mi modo de vida poquito a poco, y paso a paso me ha llevado a conocer a gente con casta, buena, que derrochan generosidad.
Para mi, hablar del Realejo, es hablar de mis Amigos, de esos que hay que escribir con mayúsculas porque son la definición exacta del término … de esos que están ahí para reir y para llorar, para disfrutar y para trabajar, los que te enseñan con su forma de ser a ver la vida con más alegría …
Desde la distancia, valoro con más fuerza algo que en un rocío escuché cantar y es lo fácil que es la vida con gente tan buena … Rocio, Mariola, Eli, Carlos, Pablo y Antonio, vosotros me habéis enseñado con vuestra manera de ser, que eso es así, y no hay más.
Nos vemos en nuestro Realejo!!!
Os quiero.
Carolina Fernández.
No hay comentarios:
Publicar un comentario